domingo, 24 de octubre de 2010

De Adopciones y Rescates

La adopción es corresponder al latido más fuerte que sabemos nos habita y nos une. 

Logramos: Traspasar especies cuando adoptamos, amamos y respetamos.

Adoptar es llenarnos de posibilidades, instantes que serán perdurables en la medida en que sepamos responsabilizarnos por esa causa.

Te invitamos: Adopta.

No compres, no promuevas la explotación ni el lucro de las especies.

Este post es un recuento de instantes. De especies que se adoptaron mutuamente.



 Azulina: fue rescatada de una jaula donde tenían más de 30 gatos en condiciones muy crueles.


 Miñiñi: fue arrojada al patio trasero de una casa con apenas días de nacida, se pensó que no sobreviviría, para dormir tiene una mantita, ella se arrulla simulando que la alimenta su mamá.
La Miñiñi para dormir chupa trapito.


 Azulina es demasiado fotogénica y lo sabe, disfruta la cámara.






 Miñiñi y la persona responsable de ella son muy similares en personalidad, aun no se sabe quién se mimetizó de quién.

Miñiñi y Azulina son compañeras inseparables. Viven juntas y son hermanas.


Octavio: estaba en un albergue dentro de una jaula con más de 20 perros. Se encontraba solo y aterrado. Una pareja lo adoptó. Al principio fue difícil para él adaptarse, ya que presentaba síntomas de maltrato, ahora es más confiado, cariñoso y feliz.













Kira: fue adoptada de un albergue. Es muy juguetona y sus ojos expresivos comunican todo lo que necesita. 



Turquesa: La rescató una pareja, se encontraba en la llanta de un trailer. La pareja responsable al admtir no poder cuidarla, buscó casa puente para posteriormente promover su adopción. Solventaron todos los gastos del veterinario ya que Turquesa se encontraba muy enferma. Finalmente llegó a un hogar donde ya la esperaban Octavio y Kira.



Lucía: formaba parte de una camada de seis gatitos de la calle, en espera de adopción. Su encanto y esos ojos verdes cautivaron a sus ahora responsables.





Gabriel: fue rescatado en una madrugada, al escuchar su llanto, los adoptantes salieron y se encontraron con algo tremendamente cruel: niños y jóvenes de entre 8 a 14 años lo comenzaban a quemar. Afortunadamente fue rescatado a tiempo. Es el papá de Lucía. 

 Traspasando especies: la persona responsable de Octavio, Kira, Turquesa, Lucía y Gabriel.




Mateo:

Tristán:
Yaco:

Son hermanos, fueron rescatados de un baldío. Se encontraban recien nacidos, cundidos de hormigas.


Al día siguiente se logro rescatar a su mamá: Manchas. Manchas era lo que vulgarmente se conoce como un gato salvaje. Después de alimentar a sus crías, fue esterilizada, vacunada y escapó. A los dos días volvío, y así estuvo unos meses. Nunca pudo adaptarse a ser una especie doméstica, defendió su libertad, hasta que un día no regresó, Hay quienes la han visto rondando en algunos jardines.


Yaco y Tristán:

Luca: fue encontrado una tarde de lluvia, una piedra, literal, lo aplastaba. Manchas lo alimentó desde el primer día que llegó y es hermano inseparable de Yaco, Tristán y Mateo.





Freya: la rescataron unos niños de su mamá, la mamá de los niños. Los niños acudieron a la puerta de la ya conocida casa de gatos y entregaron a Freya, pues su mamá amenazaba con tirarla a la basura. 
Sin duda esta experiencia como la de Gabriel nos provocan una inmensa reflexión.   


Freya se sabe hermosa y diva, es la consentida de sus hermanos. Exige atención y siempre participa en las conversaciones de los humanos. 


Aún tenemos muchas historias de adopciones. Si tú tienes una, participa y envíanos tus fotos y tu historia a colectivoculturaanimalia@hotmail.com

PROMOVER LA ADOPCIÓN ES UNA FORMA DE TRASPASAR ESPECIES Y SABERSE SERES COMPLETOS.

5 comentarios:

  1. Esta entrada me conmovió hasta las lágrimas, y no soy de lágrima fácil.

    Una preciosidad de seres, cuánta vida y cuánto qué aprender de ellos,

    y qué alivio que existan personas que se ocupen de ellos,

    ¡gracias, colectivo Animalia!

    En mi caso no conservo fotos, pero tengo una alguna experiencia con animales abandonados. Encontré dos gatitos en la basura, recién nacidos, unidos por el cordón umbilical. Uno estaba muerto, el otro vivía. Por desgracia no conseguí sacarlo adelante y murió a la semana.

    Tuve más suerte con una gatita casi recién nacida, aún con los ojos cerrados. Su madre la había repudiado (no se sabe por qué) y tras muchos esfuerzos reaccionó bien a la leche para gatos que conseguí en un veterinario. Ahora es una gata grande y feliz, y es amiga de varios perros bondadosos.

    En otra ocasión encontré una camada de perritos abandonados en el lecho seco de un río. Eran seis perritos preciosos. Todos salieron adelante y pude encontrarles casa.

    Ha sido muy emocionante leer esto,

    abrazos

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  2. Estimado Stalker, tus historias son hermosas y entrañables. Gracias por compartirlas.

    Traspasando especies te enviamos un abrazo feroz.

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  3. Y Katya donde fue rescatada¡?

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  4. sabes?
    lo conseguiste:
    coraje, impotencia, despúes llorar, y al final unas ganas de ayudar acompañada de un amor especial por estos seres (que nunca pense que me gustarian, pero que ojo: nunca maltrate ni lo haria, ahora menos que nunca... lo acepto) no entiendo como pueden existir seres tan perversos que se diviertan al hacer sufrir a seres indefensos en apariencia. Ya tendre la oportunidad de ayudar.

    saben que las amo, las admiro y respeto.
    ojala me sigan haciendo participe de esto.

    gracias!!!
    (lORZ)

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  5. Argahen, la adopción siempre es mutua. Que bueno que pasas por aquí.

    Querida Lore, ya eres parte de este colectivo, nos falta mucho por hacer. Gracias por estar cerca.

    Un fuerte abrazo.

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